Cómo limpiar puertas lacadas en blanco

Las puertas lacadas en blanco se han convertido en una elección muy recurrente en el diseño de interiores gracias a su aspecto impecable y contemporáneo. No obstante, para asegurar que mantengan su belleza a lo largo del tiempo, resulta esencial saber cómo cuidarlas adecuadamente. En este artículo, compartiremos algunos consejos de expertos sobre cómo limpiar puertas lacadas en blanco y mantenerlas en perfecto estado.

¿Qué es el lacado?

Antes de sumergirnos en los detalles de la limpieza, es fundamental entender qué es el lacado y por qué se utiliza en las puertas.

El lacado es un proceso de acabado que consiste en aplicar varias capas de pintura especial (laca) sobre una superficie, en este caso, las puertas. Estas capas de pintura se secan y endurecen para crear una superficie suave y brillante, conocida como lacado. Es posible lacar puertas en blanco pero también en otros colores. Lo cierto es que este acabado es perfecto para todos los colores de puertas de interior.

Esta técnica no solo proporciona un aspecto estético atractivo, sino que también protege la superficie de la puerta de daños y desgaste a lo largo del tiempo. Es importante saber que no sólo se pueden lacar puertas sino también muebles. De hecho los muebles lacados están presentes muchísimos hogares.

Hemos publicado un artículo donde te contamos qué puertas de interior se llevan. Si deseas darle un vistazo, verás que las puertas de interior lacadas en blanco son una de las favoritas actualmente.

Ahora que comprendemos el concepto básico del lacado, exploremos cómo limpiar y mantener estas puertas correctamente.

¿Cómo limpiar puertas lacadas en blanco?

El proceso de limpieza de puertas lacadas en blanco es relativamente sencillo, pero requiere cuidado y productos específicos.

1. Comienza eliminando el polvo y la suciedad superficial utilizando un paño suave y seco.
2. Prepara una solución suave de agua tibia y detergente suave.
3. Humedece otro paño limpio en esta solución y exprímelo bien para evitar el exceso de agua.
4. Limpia la superficie de la puerta de arriba abajo con movimientos suaves y circulares.
5. Finalmente, enjuaga la puerta con un paño húmedo y sécala con un paño limpio y seco.

Este proceso de limpieza te servirá para mantener tus puertas lacadas en blanco siempre brillantes y sin manchas. Lo mejor de todo es que no requiere de mucho tiempo ni esfuerzo.

¿Qué productos evitar al momento de tratar puertas lacadas?

Aunque hemos mencionado los productos adecuados para la limpieza de puertas lacadas en blanco, es igual de importante conocer los productos que debes evitar a toda costa.

Los limpiadores abrasivos, productos químicos fuertes, disolventes y estropajos ásperos pueden dañar el acabado lacado y causar rayones o decoloración. Evita cualquier producto que contenga acetona, amoníaco o alcohol, ya que pueden corroer la superficie y arruinar el aspecto de tus puertas blancas.

En su lugar, opta por productos suaves y específicos para limpiar superficies lacadas. Un cuidado adecuado prolongará la vida útil y la belleza de tus puertas de interior blancas.

¿Cómo recuperar el blanco de las puertas lacadas que amarillean?

Con el tiempo, es posible que notes que tus puertas lacadas en blanco adquieran un tono amarillento. Esto puede ser causado por la exposición al sol, la acumulación de suciedad o el uso de productos incorrectos.

Para devolverle el blanco original a tus puertas lacadas, puedes probar con una solución de agua tibia y bicarbonato de sodio.

Mezcla una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio en agua hasta obtener una pasta suave. Aplica esta pasta sobre las áreas amarillentas de la puerta y frótala suavemente con un paño suave. Enjuaga y seca bien.

En ocasiones es probable que debas realizar este procedimiento más de una vez. Si el amarilleo persiste, consulta a un profesional para un posible repintado. Aquí puedes pedir presupuestos GRATIS de pintores especializados en lacar puertas en tu zona. Sólo debes indicar qué necesitas y dónde lo necesitas. Hacerlo no supone ningún compromiso.