Cómo elegir el color ideal para tu salón

Escoger el color adecuado para nuestro salón es una elección que hay que tomar con cuidado. Es importante fijarse en lo que se está llevando actualmente en el mundo del diseño. También es esencial encontrar un proveedor que cuente con pinturas de calidad y que, además, se basen en estas últimas tendencias, como pinturas Tollens. Partiendo de esto, será momento de prestar atención a nuestro salón y pensar en pequeños detalles que pueden ayudarnos a elegir.

Fíjate en el espacio y luz de tu salón

Antes de lanzarte como loco a la carta de colores, fíjate bien en tu salón. Hay factores determinantes que pueden ayudarte a escoger el mejor color. El tipo de luz natural y la artificial con la que contemos es importante. ¿Por qué? Porque cuanta más luz entre en nuestra sala, tendremos mayores posibilidades a la hora de meter colores potentes.

Si se trata de un salón pequeño o no tiene mucha luz natural, siempre es recomendable usar tonos neutros y lo más claros posible, pues con ellos lograremos multiplicar esa luz natural y la sensación de amplitud. Si vas a optar por colores claros, escoge siempre blancos que tiren al beige, pues otros pueden quedar excesivamente fríos.

En los salones más pequeños, es mejor usar la proporción del 80% en tonos neutros y un 20% en toques de color, ya sea a través de las paredes más pequeñas o de los muebles y accesorios como el textil.

Colores atrevidos en las paredes

¿Y si quiero añadir un color más fuerte? La opción menos arriesgada es la de escoger una única pared. Una pared que, además, esté muy bien enmarcada, como pudiera ser la que está justo detrás del sofá o la de la zona de la TV.

Si se tratara de un salón abierto al comedor, también podría servir la de la mesa del comedor. En estas paredes podemos dejar volar nuestra imaginación y apostar por tonos más fuertes que van desde el rojo hasta los ocres.

El tipo de pavimento y la carpintería

Nunca obvies el pavimento de tu salón, pues este elemento tiene muchísimo que decir, en ocasiones incluso más que los muebles; y es que si lo pensamos bien, el pavimento acompaña a toda la superficie. Un suelo de madera clara, por ejemplo, permitirá más juego a la hora de introducir color. Si contamos con baldosas de colores, quizá tengamos que ceñirnos a sus tonalidades.

Fíjate además en la carpintería que tienes en el interior, tanto en puertas como en ventanas. Si puedes, pinta estos elementos de blanco para poder unificar los materiales y rebajar el peso visual.

Elige el efecto que quieres transmitir

Por último, no te olvides que los colores crean sensaciones. Escoge aquellos que pienses que pueden crear un espacio más agradable y cómodo. Los rojos, por ejemplo, crean cierto grado de excitación. Los azules y verdes, por otro lado, calman y aportan serenidad.

No te olvides de los muebles

No es que no sean importantes, pero evidentemente teníamos que fijarnos en otros puntos que lo eran más. Ahora bien, los muebles también determinarán el color que mejor puede ir con tu salón.

Los muebles de madera natural, por ejemplo, permiten mucho más margen de maniobra, sobre todo cuando estamos ante muebles de madera sin tratar.

Los muebles más oscuros se sentirán más cómodos con colores mucho más claros. Recuerda que la intención no es saturar.

¿Y si quiero ir a la moda? Si quieres estar acorde a las últimas tendencias, llena tu salón con grises, azules, turquesas o con negro. Apuesta por colores de este tipo mezclándolos con blancos. Verás que el resultado será genial.

Esperamos que estos consejos te vengan bien a la hora de elegir el color ideal para tu salón. Y ya sabes, lo mejor siempre es recurrir a especialistas en pinturas como Tollens. ¡Gracias por seguirnos!

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