El color blanco es la base de cada ambiente que se complementa con tonos pasteles que agregan detalles a cada rincón del hogar, espacios amplios y abiertos con una maravillosa vista al exterior de la casa. Un lugar bello y elegante donde se puede sentir la delicadeza de las texturas de las telas utilizadas en la decoración que son pura inspiración.
Utilizar una paleta de colores claros es una buena opción para cualquier ambiente desde los espacios más diminutos hasta los más amplios, lo importante es lograr ese estilo que refleje tu personalidad que logre transmitir tus sentimientos más profundos.
En este caso la propuesta es romántica y delicada donde el Feng Shui toma forma en cada sector de la casa creando un ambiente donde el mobiliario se encuentra perfectamente planeado para que se pueda circular con tranquilidad.