Losestudios infantiles deben ser lugares llenos de luz. Rincones que tengan las características necesarias para que nuestros pequeños puedan estudiar y hacer sus tareas del colegio. Por este motivo, no hay que dejar de lado los estudios infantiles, pues lejos de lo que pueda parecer, son espacios de lo más importantes dentro de nuestro hogar.
Podemos optar por estudios coloridos, con el fin de que nuestros hijos vean fomentada su creatividad. Paredes naranjas y estanterías divertidas que puedan amenizar las jornadas de estudio de nuestros hijos.
Los más pequeños también tienen derecho a tener un rincón especial en el que poder hacer sus tareas. Así, podemos optar por una mesa baja con taburetes, incluso, si nos atrevemos, podemos colocar una pared de pizarra para que puedan extender sus labores pictóricas a la misma.
Cuando hay más de un niño hay que crear ambientes de estudio para ambos. Lo ideal es juntarlos en el mismo espacio usando mesas diferentes. Que cada uno tenga su archivador, su silla o taburete y su escritorio. Podemos optar por que estén uno junto al otro o bien uno de espaldas al otro. Dependerá de la actitud de cada niño. Si son fáciles de distraer será mejor que tengan un poquito de intimidad.
No es la primera vez que os hablamos del potencial de los antiguos armarios empotrados. Podemos usar estos espacios para crear auténticos despachos, también para nuestros hijos. Un lugar lleno de rincones en los que poder colocar libros, cajas y libretas. Y es que el orden en los estudios infantiles tiene que ser máximo. De esta forma, los pequeños ya aprenden que ser ordenados será un requisito para tener éxito en los trabajos futuros.
Por último, nos encanta la opción de esos muebles que permiten tener la cama justo arriba de la zona de estudio. Sin duda una forma de economizar el espacio y de crear un estudio independiente en las habitaciones más pequeñas.
Fotos vía: pbteen.com, hgtv.com, plumprettysugar.tumblr.com, bhg.com,