Hoy queremos hacer hincapié en el poder del textil en la decoración. En concreto, queremos hablaros de un elemento que está presente en casi todas nuestras casas, el edredón nórdico.
Lo cierto es que las posibilidades de vestir estos edredones nórdicos son infinitas. Existen numerosos modelos que van desde los colores y figuras clásicas, monocromáticos o estampados de flores hasta las figuras geométricas más atrevidas y psicodélicas.
No obstante, hoy no queremos hacer alusión a este tipo de estampados, que si bien pueden casar perfectamente con el resto de nuestra decoración, son, sin lugar a dudas, menos divertidos que los que hoy os presentamos.
Y es que en la actualidad, la creatividad se ha dejado caer por estos mundos del textil para camas, dando como resultados modelos realmente extravagantes y divertidos.
Son ideas geniales para incluir en la habitación de jóvenes adolescentes, eso es evidente. Pero además, cómo normalmente se suelen tener varias fundas de edredón nórdico, podemos alternarlas en nuestro propio dormitorio.
Existen fundas para los más cocinitas ¿Te imaginas dormir todas las noches en una tableta de chocolate? Seguro que nuestros sueños serían mucho más dulces. Quizá no sería tan agradable hacerlo enlatado en esta lata de sardinas, pero sigue siendo la mar de original.
Y para aquellos que prefieran tener un recuerdo de sus vidas entre las sábanas, que mejor forma de hacerlo que con una divertida funda con sus fotos impresas a modo de polaroids.
La variedad es increíble. Incluso, si somos originales y tenemos buenas ideas, podemos optar por comprar una funda lisa, diseñar nuestro dibujo e imprimirlo. No es más complicado que la impresión en camisetas, tan sólo tendremos que encontrar un establecimiento que cuente con impresora para telas.
Fotos vía: compradiccion, handfotos
