Centro de mesa minimalista para San Valentín

Una de las cosas que más disfruto con mi pareja en San Valentín es preparar una cena romántica a la luz de las velas, pues no sólo me da la oportunidad de compartir una conversación íntima y un momento agradable, sino que es la excusa perfecta para cambiar un poco la decoración de mi piso. En estas ocasiones, la decoración de la mesa se convierte en el epicentro decorativo. No soy una persona muy apegada a las tradiciones estéticas de cada temporada, por lo que decorar para esta fecha sin usar rojo y rosa se convierte en todo un reto. Si este también es tu caso, entonces este centro de mesa minimalista para San Valentín puede que sea la respuesta a tus plegarias. Lo mejor? Puedes adaptarlo a los colores de tu preferencia y está hecho en materiales reciclados.

Para hacer este centro de mesa de San Valentín necesitas estos materiales: ramas de árbol secas, sin hojas (puedes utilizar algunas que hayas recogido en el jardín), un florero alto del material y color de tu preferencia, pintura, papel periódico o páginas de libros viejos (también puedes usar papel de colores), retazos de telas, tijeras y pegamento.

Comienza pintando las ramas del color que desees. En blanco o plateado quedan hermosas y combinan con casi todo. Déjalas secar y mientras tanto, ve cortando corazones en la tela y papel. Puedes pegar los corazones de papel sobre la tela, para que éstos tengan más volumen y peso. La combinación de colores y materiales queda a tu elección! De hecho, si quieres usar flores o pompones de papel de seda, puedes hacerlo.

Una vez estén cortados, introduce las ramas en el florero (agrega un poco de peso en el fondo, para que tenga estabilidad) y cuelga los corazones utilizando hilo de nylon o trocitos de alambre. Listo! tienes un lindo centro de mesa para tu cena romántica de San Valentín. Se me ocurre que puedes colgar algún regalito en las ramas para hacerlo más romántico. Si quieres ver más fotografías, visita Celebrations, el sitio donde encontré esta fantástica idea.